1. Introducción
La palabra “algolagnia” (algos “dolor; lagneia “placer”), fue creada por Schrenk-Notzing, a comienzos de siglo XX y se distingue entre algolagnia activa (sadismo) y algolagnia pasiva (masoquismo).
El término sadismo fue originalmente introducido por Von Krafft-Ebing en 1898 para designar el placer de un individuo de someter a otro.
El término masoquismo fue acuñado por el mismo autor para designar el deseo de un individuo de ser objeto de dolor o de ser sometido por otro.
En este trabajo se harán algunas consideraciones clínico-sexológicas sobre estas formas de parafilias (DSM IV) o de desviaciones sexuales (CIE 10) y se analizarán la importancia psiquiátrico -forense de las mismas.